Los colombianos nos caracterizamos por ser personas alegres y espontáneas y esto se refleja mucho al momento de negociar, pues usamos el humor o el encanto para convencer al otro.
Para las personas que no conocen nuestra cultura, es difícil entender los hábitos o frases que tenemos al momento de comprar o vender y eso por eso que decidimos hacer una mini guía de los refranes más utilizados por los colombianos al momento de querer negociar algún producto o servicio.
¿Reconoces o has utilizado alguna de estas frases para negociar a lo colombiano?
1. De entrada, sin esperar nada más… Este dicho siempre lo usamos para persuadir al vendedor del precio que va a ofrecer y generalmente, termina funcionando.
2. Cuando queremos asegurarnos de alguna compra, utilizamos esta frase para referirnos a las falsas promesas o negocios que son difíciles de realizar, ya que preferimos estar seguros así sea de una sola cosa y no perder lo poco que se ha logrado.
3. Este dicho puede sonar un poco grosero pero es muy popular. La utilizamos en situaciones donde no está claro cómo se va a realizar la entrega del producto o servicio o necesitamos estar seguros de que nos van a pagar y es ahí cuando decimos: «Si lo quiere, plata en mano y culo en tierra»
4. A la hora de negociar somos rápidos y eficientes, es por eso que utilizamos este dicho para referimos a alguien que es inteligente y entiende la situación, sin necesidad de largas explicaciones.
5. Como buenos negociantes que somos, vemos oportunidades en todo lugar. Consideramos que si no arriesgamos algo, no vamos a poder ganar y es por eso que este dicho lo utilizamos para coger fuerzas y realizar el negocio.
6. En algunas ocasiones los colombianos queremos solucionar varios asuntos con el menor esfuerzo. Con este dicho queremos dar a entender que con un sólo negocio podemos conseguir dos resultados diferentes.
7. ¿Para qué le damos tantas vueltas y no vamos al grano? Queremos decir que es mejor entrar en el fondo del tema rápidamente, que salirse por la tangente.
8. Dicho de los abuelos, repetido por todas las generaciones… Este refrán lo utilizamos cuando se nos presenta una buena oportunidad, que no podemos desaprovechar.