Si estás buscando un plan aventurero, natural y lleno de cultura para estas vacaciones, Ciudad Perdida es el lugar ideal. Este paraíso escondido en las montañas de la Sierra Nevada de Santa Marta es el mítico santuario perdido de los indígenas Tayronas, lleno de numerosas piscinas naturales, arqueología y caminos llenos de flora y fauna que te dejarán sin aliento.
Como todo tesoro, Ciudad Perdida, también llamada El Machu Pichu de Colombia, es un lugar de difícil acceso por sus rutas en ascenso, aunque es cada vez más asequible para visitantes que van en busca de ecoturismo. El camino hasta encontrarla es exigente físicamente, lleno de mosquitos y cuestas empinadas que te harán sudar a borbotones. Pero vale la pena, realmente vale la pena cada esfuerzo y peso invertido. Entrarás en contacto no sólo con la historia que corre en tus venas sino con la plenitud de la naturaleza virgen, una selva que guarda más de 3000 especies, ríos de agua cristalina y bosques a lado y lado.
¿Qué tanto esconde?
Teyuna, nombre de esta ciudad, fue descubierta recién en 1979 por un grupo de arqueólogos del Instituto Colombiano de Antropología, casi 14 siglos después de que los Tayronas la habitaran entren el año 800 y el 1600. Tal vez, gracias a este lapso en que el santuario fue visitado exclusivamente por miembros de las tribus locales, es que aún permanece con ese aire de sagrado y una composición intacta. Recordemos que la Sierra Nevada es un pico que asciende desde el mar Caribe hasta los 5.775 metros de altura, habitado por cuatros pueblos indígenas: los arhuacos, los wiwas, los koguis y los kankuamos que suman más de 30.000 personas. Y en medio de este mundo, Ciudad Perdida, que otrora fue el corazón de la vida aldeana de los Tayronas, es ahora un destino turística apetecido por colombianos y extranjeros del mundo entero, que ven aquí buscando una oportunidad para retornar a las raíces.
¿Cómo llegar?
Hay diferentes agencias de viaje que llegan hasta Ciudad Perdida como Expotur, Ciudada Perdida Tour o Selvaventura. Y sin importar cuál elijas o si te quedas 4 o 6 días, el costo del viajes es de $850.000 en promedio que incluyen alimentación, hospedaje, guía, seguro de viaje, aporte a las comunidades, entrada al Parque Arqueológico Teyuna y transporte desde la hermosa ciudad de Santa Marta, que es el punto de encuentro desde donde se arranca sí o sí. Veamos un esbozo del recorrido de 4 días para que te hagas una idea del viaje y puedas prepararte con antelación:
1. El encuentro es en la sede de cada empresa o en tu respectivo hotel a las 9:30 de la mañana. Desde allí tomarás una camioneta 4 x 4, que es la única capaz de subir los caminos empedrados que deben recorrerse durante dos horas y media para llegar hasta la región del Mamey donde almorzarás probablemente mojarra frita con patacón, podrás bañarte en aguas naturales y acamparás en hamacas o esteras en medio de una noche con el cielo estrellado.
2. El segundo día comienzan las caminatas en forma y desde muy temprano iniciarás el trekking por un camino de siete horas a través del Valle del río Buritaca, en el cual conocerás las viviendas autóctonas de la aldea Mutanshi donde habitan Koguis y podrás disfrutar de un delicioso baño en agua dulce hasta llegar al asentamiento del segundo campamento.
3.¡Lo esperado! El tercer día finalmente iniciarás desde la madrugada el ascenso por los 1.200 escalones construidos por los Tayronas hasta llegar a Ciudad Perdida, donde los guías te mostrarán la apasionante historia que envuelve a este Santuario, te deleitarás con un paisaje suspendido en el tiempo, y claro, podrás tomar todas las fotografías que desees sin alterar el equilibrio del entorno. Hacia el mediodía descenderás nuevamente hasta el campamento para descansar, porque al otro día es momento de volver a casa.
4. Este, es el día final de la aventura. Desde temprano inicia el regreso a Mamey donde todo comenzó, de nuevo te aguarda un recorrido acompasado por ríos donde podrás bañarte y las maravillas del paisaje de la Sierra Nevada, antes de subirte una vez más a la camioneta que te llevará a tu hotel en Santa Marta a eso de las 5:00 de la tarde.
Seguro te preguntarás cuál es la diferencia entre el tour de 4 días con el de 6. Pues bien, con otros dos días de viaje podrás asimilar con más calma todo el paisaje, conversar sin prisa con los aldeanos y realizar una caminata extra de aproximadamente cuatro horas para visitar algún poblado indígena como Mumake, donde incluso podrás conocer en persona a un Mamo: la máxima autoridad religiosa para los indígenas. Depende de ti. Sea cual sea la opción que elijas, sin duda este viaje requerirá un infinito respeto de principio a fin por nuestros antepasados, por sus tradiciones, por sus tesoros naturales y ante todo, por nuestra Colombia; al tiempo que renovará la energía en tu cuerpo por la inigualable cercanía con la naturaleza.