Acerca de la felicidad se habla muchísimo, pero lo cierto es que no pareciera que haya una fórmula para alcanzarla. Se dice que el dinero no puede comprarla, que las cosas materiales generan preocupación y apego, que la gente que se casa es menos feliz que la gente soltera. ¿Será cierto?
Para dar algunas respuestas respecto a este tema, existe una encuesta de Medición de Bienestar del Departamento Nacional de Planeación (DNP): en ella se miden índices de depresión, preocupación, satisfacción y felicidad.
Sigue leyendo para descubrir cuál es la ciudad más feliz de Colombia.
Entonces, ¿quiénes son las personas más felices?
Sí. Los hombres, aunque por poco, son más felices que las mujeres. En una escala de 0 a 10, el promedio de los hombres encuestados dijo que su nivel de felicidad es de 8.3, mientras que el de las mujeres es de 8.1 (tomado de elcolombiano.com). De igual forma, el nivel de satisfacción de los hombres califica en 8.7, frente a un 8.5 en las mujeres.
La encuesta también arroja mayores niveles de preocupación y depresión en las mujeres que en los hombres. En general, indica que hombres y mujeres son igual de felices, excluyendo a la muestra poblacional de estrato 1: Las mujeres de menor nivel socioeconómico, se deprimen un 50% más que las mujeres estrato 4.
Según los resultados arrojados por la encuesta, a pesar de las dificultades, las parejas en unión libre y casadas son más felices, menos preocupadas, más satisfechas y menos deprimidas que las personas separadas, divorciadas o viudas.
Los hombres más felices son los que viven en unión libre y las mujeres más felices son las casadas.
La encuesta se alejó de los estándares de pobreza según cifras del Dane y se enfocó en revisar la percepción de pobreza o riqueza de los encuestados.
De esta manera, aquellos que se consideran pobres; se encuentran 47 % más deprimidos y 22.5 % más preocupados que las personas que no se consideran pobres.
Las personas que expresaron tener ingresos insuficientes, se mostraron 123% más deprimidas y 62% más preocupadas que aquellas a las que su dinero les alcanza.
Una característica presente entre los más felices y menos preocupados. Entre los que arriendan propiedades, los estratos 5 y 6 son los que presentan más altos índices de preocupación y menores índices de felicidad.
Esto incluye: acceso a internet, estudios de posgrado, leer al menos un libro por año, ser optimista sobre el futuro y tener capacidad de ahorrar.
A pesar del ruido, caos, congestión y estrés con el que se convive en las ciudades, las personas que viven en el cono urbano indican ser más felices y satisfechas que aquellas que viven en el campo. Esto, salvo por las comunidades indígenas y afrodescendientes de zonas rurales, que mostraron índices de felicidad 6.3% más altos que aquellos de los citadinos.
De las cuatro ciudades grandes de nuestro país, Medellín arrojó los mayores índices de felicidad y los menores índices de preocupación.
No significa que las personas que no cumplen estas características son infelices. Simplemente, las variables mencionadas marcaron la calificación máxima de felicidad, según las respuestas de casi 10.000 colombianos encuestados.