El emprendimiento es uno de los caminos más difíciles que un hombre puede decidir caminar. La competencia y el riesgo en las inversiones hacen retroceder a muchas personas, que en la mayoría de casos prefieren mantener un margen de seguridad en sus vidas que se enmarquen en la cotidianidad de la jornada laboral. Pero aunque se decida dar el paso, la decisión continúa siendo difícil. Aquí te contamos los 7 errores más comunes que comete un emprendedor.
Primero: no pensar antes de gastar. Cuando se consigue financiamiento, es factible comenzar a realizar gastos que no deberían ser prioridad a la hora de realizar inversiones. Invertir en demasiados recursos es el peor camino que puedes caminar a la hora de crear Empresa.
Segundo: intentar hacerlo todo solo. Es muy común la frase que dice que un emprendedor, cuando está apenas iniciando, es el gerente, el secretario y el mensajero de su negocio. Pero eso no tiene por qué materializarse. Uno de los rasgos más importantes en el liderazgo es ser capaz de delegar.
negociosyemprendimiento.orgTercero: no tener una visión definida. De nada sirve tener la mejor idea del mundo, si no te has tomado el tiempo suficiente para aterrizarla y concluir un procedimiento estable. Lo mejor para garantizar una excelente gestión, es idear una buena metodología a la hora de decidir sobre cualquier bien o servicio.
Cuarto: no ser consciente de las debilidades. El mundo de los negocios es un ambiente hostil. Si tienes una buena idea y no sabes comercializarla, alguien lo hará por ti. Sé consciente de tus debilidades e intenta crear parámetros para fortalecerlas.
Quinto: no saber vender. Un bien no se comercializa por deseos del empresario, sino por decisión del cliente. Antes de focalizar las ventas, es necesario hacer un estudio detallado del cliente. Saber vender es la primera prioridad de cualquier negocio.
Sexto: no tener al día el papeleo y trámite legal. Un solo error en la inscripción de cualquier documento legal, es causa suficiente de echarlo todo a perder. Mucho cuidado con no pagar los impuestos debidos, porque la DIAN puede hacerte una visita inesperada.
Séptimo: despreocuparse con los empleados. La seguridad social, el seguimiento riguroso de las normas de salud y seguridad en el trabajo y el pago de salarios es un tema que se obvia generalmente al inicio de cualquier empresa. Una demanda es suficiente para menguar los sueños de emprendimiento. ¡Ojo con el trabajador!