Fueron siete las víctimas mortales de la operación que acabó con la vida de Óscar Pérez, el exsoldado venezolano que tanto denunció al régimen de Nicolás Maduro.
Entre ellas se encontraba la colombo venezolana Andreína Ramírez, quien tras la lucha y paciencia de sus padres colombianos, la señora Faride Mantilla y el señor Ángel Ramírez, logró recibir el último adiós en medio de la noche, con la luz de los celulares de los asistentes como iluminación y rodeados de compañeros y amigos de la víctima.
¿Cómo se realizó el sepelio?
Más de ocho horas duró la espera del cuerpo de la estudiante de odontología que se encontraba en el cementerio Jardines del Mirador, bajo la custodia del ejército venezolano; sin embargo, el sepulcro se realizó en el cementerio La Consolación.
Según El Colombiano, en el sepelio de quien es considerada una «heroína de la patria» por millones de venezolanos, cuando los restos mortales de Ramírez estaban siendo enterrados, entre las lágrimas salieron a relucir frases como: “la acribilló la dictadura”, “va a caer, este gobierno va a caer” y “queremos libertad”.
Tras las honras fúnebres, queda el dolor de los padres y amigos que acompañaron a Andreína, además de la frase publicada en el medio citado anteriomente:
“No creemos que Maduro los hubiera querido vivos ¿cómo es posible que pasaran por encima de las órdenes del presidente?, eso es mentira, Maduro los mandó a matar”.
La noticia de la muerte de Andreína los tomó por sorpresa
Para la pareja de colombianos fue una sorpresa enterarse que su hija estaba en el lugar de los hechos, pues hasta ahora no había mostrado señas de ser la «terrorista» que describe el oficialismo.
«No sé porque le hicieron eso, mi Dios es justo y ellos tienen que pagar», sentenció la madre.