Una de las mayores problemáticas que viven los padres en la actualidad es tener que luchar con la adicción de los hijos a los aparatos tecnológicos y vivir en el dilema de si estos realmente les ayudan a incentivar su inteligencia o si por el contrario hay otras actividades que la pueden incentivar más.
“Una investigación publicada en Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine, y llevada a cabo por la Universidad Sainte Justine de Quebec y la Universidad de Michigan, demuestra que los niños que a los dos, tres y cuatro años de edad pasan más horas frente a la televisión tienen mayores problemas en el colegio. Por ejemplo, tienen un descenso del seis por ciento de logro en matemáticas”.
Una de las propuestas está en cambiar los aparatos tecnológicos por instrumentos musicales.
“Según varias investigaciones, exponer a un hijo a tocar instrumentos en edades tempranas puede tener un impacto positivo sobre su coeficiente intelectual, su nivel de lectura y su desarrollo cerebral. Además, los adultos que aprenden a tocar instrumentos también consiguen beneficios de esta práctica: una mayor concentración, una mayor actividad cerebral y un mayor placer y bienestar”.
“Para comprobar esta hipótesis, un equipo de Investigadores de la Universidad de Toronto (Canadá) realizaron un estudio con niños de seis años. De forma aleatoria se les impartió clases de piano y voz a algunos de ellos. Los demás no recibieron ninguna formación. El estudio demostró que aprender a tocar un instrumento puede aumentar las habilidades para las matemáticas y el cociente intelectual en general. Así que, si eres padre, en vez de dejar a tu hijo delante del ordenador, apúntale a clases de guitarra o piano. Así estarás estimulando su inteligencia y su creatividad”.
Fuente: Psicología y mente