Hace días, Johanna compartió en sus redes sociales una fotografía para recordar a sus gemelas, a quienes perdió cuando tenía 7 meses de embarazo. Después de superar el momento más duro de sus vidas, Johanna y Juanse abrieron su corazón para contar lo que sucedió.
“Mi embarazo fue perfecto, no me dolía nada, no me dieron náuseas pero le cogí fastidio a la gente, me producía asco el pollo, y quería todo el tiempo comer cosas ácidas, en el embarazo me apegué a Juanse, cuando se iba a trabajar sentía la necesidad de llamarlo, de escucharlo, así que me volví intensa con él, a otras parejas les pasa distinto pero en mi caso fue así”.
Al séptimo mes de embarazo, no las empecé a sentir, era el día sin carro en Bogotá en una mañana de febrero, me concentré y no se movieron, yo esperé un día más, esperando sentirlas más tarde, pero no fue así…»
Johanna decidió ir al hospital de urgencia para saber qué estaba pasando con sus bebés. La remitieron para la Clínica Reina Sofía y después de 5 días internada y de múltiples exámenes, a la pareja le dieron 3 salidas para Antonella y Anabella: la primera fue que se salvaran las dos, la segunda que una de las dos se salvara y la última que murieran las dos.
“En todo momento estuvimos pensando con el corazón y nuestra ilusión era tenerlas a las dos, que hicieran todo lo posible para que juntas sobrevivieran. En las ecografías se veía a una de las bebés con una pequeña mancha blanca que era un derrame cerebral irreversible. La opción a seguir era coagular el cordón para que una se salvara. Cortaron la arteria para que bombeara sangre a la otra hermana.
«Puede que la bebé nazca con un síndrome muy pequeño o al contrario con una parálisis para toda la vida, y ustedes tienen que lidiar con un bebé el resto de sus vidas, nos dijo la doctora, pero con el corazón partido les suplicamos que las salvaran a ambas. Debido a esto, a Johanna le practicaron laparoscopia, un procedimiento por medio del cual le fueron introducidas una pequeña cámara y un láser cerca a su ombligo para cortar la arteria, pero lamentablemente, durante este procedimiento una de sus gemelas había murió.
«Me realizaron una ecografía pero no pudimos ver bien a la bebé que sobrevivió, así que al día siguiente nos dijeron que había la posibilidad de que viviera pero teniendo en cuenta que iba a nacer con alguna enfermedad compleja. Con el corazón en la mano le dije a Juanse: ‘Pues que nazca muerta, porque me daría muy duro verla nacer viva y que agonice muriendo, eso no es vida para nadie”, dice Johanna.
A las 2:20 de la madrugada estábamos durmiendo en la habitación y nos prende la luz la enfermera y nos dice, ya nacieron las bebés”, Johanna se despertó. “Vi a mis bebés grandecitas, hermosas, no sabemos, pero la segunda bebé también sufrió un derrame cerebral de la nada”, dijo Juan Sebastián.
“Al llegar a la casa fue difícil, yo aún estaba en shock, y cuando llegué me desboroné completamente, empecé a llorar como niña pequeña y no paraba, era una tristeza enorme”, recordó Johanna.
Casi 3 años después de este difícil momento, la pareja se siente lista para intentarlo de nuevo. Ambos están trabajando para que esta vez todo salga bien y sea un embarazo saludable, además, esta situación los volvió más fuerte y la relación ha estado muy bien. “Las cosas así sean dolorosas pasan para bien, siento que Dios nos usó con esta situación para llegar a muchos corazones destrozados por esta misma situación en cualquier rincón del planeta”, afirmó la actriz.